La presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, ha anunciado su dimisión. Ha sido en la Real Casa de Correos. Cifuentes ha asegurado que ya tenía tomada la decisión hace tiempo, que se la había comunicado a su equipo más próximo y que tenía decidido anunciarla tras los actos institucionales del próximo Dos de Mayo: «Me voy para que la izquierda no gobierne en la Comunidad de Madrid».
 
La hasta hoy presidente de la Comunidad de Madrid ha lamentado que se hayan traspasado muchas líneas rojas, «y se haya llegado más allá de la política». Cifuentes ha recordado que ha sido espiada antes y después de ser Delegada del Gobierno en Madrid.

Sobre el vídeo publicado este miércoles por OK Diario en el que fue retenida por un vigilante de seguridad en 2011 por presuntamente sustraer dos cremas cuando era vicepresidenta de la Mesa de la Asamblea de Madrid, ha asegurado que «el vídeo obedece a una situación de un error involuntario, una compra en un supermercado que me llevé de manera involuntaria». «Esa grabación se ha utilizado para ir más allá de lo político», ha subrayado.
 
Cristina Cifuentes ha recalcado que toda su actuación, «toda mi vida», se ha puesto en tela de juicio y que además de destruir al adversario político «se ha querido destruir a la persona»: «Esto es parte del precio que hay que pagar por tener tolerancia cero con la corrupción».

«La posibilidad de que la izquierda pudiera gobernar en la Comunidad de Madrid me hizo reflexionar mucho», ha asegurado Cristina Cifuentes, que ha enumarado los logros de su Gobierno. La razón de su dimisión, «evitar que el trabajo de los últimos tres años, que esa gestión se pusiese en riesgo». Cifuentes da un paso atrás «para evitar que la izquierda gobierne en Madrid».  

Cristina Cifuentes ha agradecido el apoyo de su familia -«ellos saben quién soy», el trabajo de sus colaboradores, y ha transmitido un agradecimiento especial a los madrileños y madrileñas: «EEspero que entiendan que la resistencia tiene un límite»: «Me voy con la cabeza muy alta, con un sentimiento amargo desde el punto de vista personal pero muy satisfecha, hemos hecho un buen trabajo. La vida de los madrileños es hoy mejor que hace tres años cuando empezamos a gobernar. Me quedo con lo bueno, lo malo lo intentaré olvidar».

«A pesar del dolor personal que yo siento mi padre se sentiría orgulloso de mi».