La Empresa Municipal de Transportes (EMT) denunció ante la Justicia el pasado 26 de enero un posible caso de phising, espionaje en algunos de sus equipos informáticos, ha informado el Ayuntamiento de Madrid.
El posible ataque cibernético o suplantación de identidad –un modelo de abuso informático que se comete cuando se intenta adquirir información de forma fraudulenta– se produjo el día 25 en algunos equipos de la EMT. Un día después el Ayuntamiento acudió a la Justicia.
En respuesta la EMT contratará un servicio de auditoría de ciberseguridad para garantizar la seguridad de sus sistemas y para descartar el uso de software malicioso o de intentos fraudulentos de acceso a sus sistemas. El pasado 6 de febrero publicó un anuncio de transparencia solicitando manifestaciones de interés para la ejecución del contrato Servicio de auditoría de ciberseguridad.
El contrato servirá para comprobar la seguridad de equipos informáticos de la EMT y analizar si determinados equipos informáticos han sido o siguen siendo objeto de software malicioso o de conexiones no autorizadas o sospechosas que puedan haber eludido los sistemas de seguridad informática implantados en la EMT tras el ataque de phishing.
Fuentes municipales han trasladado a Europa Press la «gravedad de que el PP esté acusando a la EMT de espiar a sus empleados pretendiendo que la empresa sea vulnerable a ataques de espionaje», todo ello después de que el principal grupo de la oposición haya pedido la retirada del contrato de ciberseguridad.
«Es una invención del PP sobre un contrato publicado en el portal de transparencia. ¿Cómo es posible que el PP, que ha destruido discos duros para tapar un escándalo de financiación ilegal, pueda poner en duda un contrato de ciberseguridad para evitar intrusiones ilegales en sistemas informáticos de la EMT?», se preguntan las mismas fuentes.