El grupo constructor Rayet promoverá la mayor playa urbana artificial de Europa en el municipio de Alovera (Guadalajara), en pleno Corredor del Henares y a 40 minutos de Madrid capital, con una inversión prevista de 15,6 millones de euros y que estará operativa entre 2,5 y 3 años. Alovera Beach.
Para abordar el proyecto, el grupo Rayet, propiedad de Félix Abánades y primer accionista de la inmobiliaria cotizada Quabit, se ha asociado con Crystal Lagoons, empresa especializada en construcción y mantenimiento de este tipo de playas artificiales.
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La playa estará compuesta por una lámina de agua de unos 25.000 metros cuadrados, rodeada de una zona de arena de 15.000 metros cuadrados de superficie.
La instalación se enmarca en el nuevo parque de ocio que se promueve en la localidad y al que da nombre, el Alovera Beach. El complejo se extenderá sobre una superficie de 105.000 metros cuadrados y, además de la playa, contará con zonas infantiles, un área para deportes náuticos y servicios de restauración, además de un aparcamiento con capacidad de 1.000 plazas y un acceso directo desde la carretera A-2.
Así lo ha detallado en rueda de prensa el propio Félix Abánades, el director regional para Europa de Crystal Lagoons, Francisco Matte, junto al director general de Rayet Medio Ambiente y encargado del proyecto, Antonio Puy.
Abánades ha señalado que el proyecto se levanta en una zona de influencia de 800.000 personas como es el corredor del Henares y a unos 50 kilómetros de Madrid capital, en una localidad donde además está prevista la construcción de 4.000 nuevas viviendas.
El presidente del Grupo Rayet ha asegurado además que con ello se va a regenerar una zona medioambientalmente degradada y que el Pleno municipal de Alovera ya ha aprobado a este desarrollo. Por ello, está convencido de que el municipio se convertirá en una referencia en actividades al aire libre.
Tardarán aproximadamente un año en obtener todos los permisos necesarios y al menos otro año y medio para construir el complejo. Por tanto, estará operativo entre 2,5 y 3 años.
Se prevé la asistencia inicial entre 250.000 y 400.000 visitantes.De momento no se ha fijado la cuantía de entrada al complejo, pero se trabaja sobre una cifra de 10 euros.
El proyecto se sustenta en cinco áreas con la intención de que tenga actividad todo el año, sobre todo a través de las actividades de deportivas. Además, se contempla un restaurante con capacidad para 1.000 personas con intención que acoja eventos cuando no haya temporada de baño.
A su vez, se prevé crear un acceso con un puente desde la Nacional 2 y destaca las buenas conexiones para llegar a la laguna, con una parada de Cercanías a cinco kilómetro de los terrenos. También se desplegarán toboganes acuáticos para adultos y niños.