Estas fechas navideñas están caracterizadas por los excesos alimentarios, comidas a deshoras o fuera de nuestros horarios habituales. Todos los excesos y desajustes pueden afectar a la dieta ya la salud.
Pero existe una dieta basada en nutrientes para no coger estos indeseados kilos de más durante la Navidad.
El desayuno debe incluir infusiones o té que son ideales para ayudarnos a depurar el hígado, que es el principal órgano que sufre los excesos. También, se puede optar por batidos de avenas y semillas junto a dos piezas de la fruta de temporada. E, incluso, añadir cereales con alto contenido en fibra, huevos cocidos o un yogur bajo en grasas.
Es importante en todas las dietas no dejar que nuestro cuerpo pase hambre, ya que a la hora de una comida, se ingiera mayores cantidades y mayor variedad. Por lo que es recomendable que a media mañana se ingiera alguna pieza de fruta o barrita con cereales.
A la hora de la comida, la mejor recomendación es optar por ensaladas aliñadas con aceite de oliva, salsa teriyaki o de soja. Pero también debemos de incluir algo de proteína al organismo como la carne mara, pollo sin piel, pescado o, incluso, alguna harina pero en cantidades mínimas. Pero, sin duda, el mejor alimento para no engordar y saciarte es la pasta o arroz integral.
A la hora del postre, no hay que excederse. Lo ideal es una pieza de fruta, té verde o infusión.
Si eres de las personas que merienda, puedes optar por alguna pieza de fruta, verduras o incluso frutos secos que aportan omega 3 para evitar el colesterol.
Para la cena, se puede elegir tanto una ensalada como una ensalada de fruta con manzana que es muy beneficiosa para depuraciones. También, se puede optar por sopas de verduras y/o legumbres y caldos suaves que nos ayuden a recargan defensas sin dejarnos esa sensación de pesadez.
Para terminar, se puede realizar una infusión de melisa o pasiflora que ayuda a conciliar mejor el sueño.
Lo ideal, según dietistas y nutricionistas, es cenar unas 3 horas antes de irse a la cama, para asegurar que los alimentos se han digerido bien y se ha realizado algún tipo de movimiento antes de ir a descansar.
Entre los alimentos que se debe evitar durante estas fechas, destaca el pan, las patatas, el arroz y pasta que se debe sustituir por sus homónimos integrales, las carnes con grasas, no beber agua mientras comemos y, no acostarse recién cenados ya que no favorece a la pérdida de peso ni a la digestión.
Por supuesto, el alcohol y las bebidas con azucares quedan descartadas de la dieta y, de hacer, debe ser en pocas cantidades y nunca a diario.