Todo sigue igual y, después de más de nueve meses, en Madrid no ha habido parto alguno. Tenemos los mismos problemas que el día posterior a las Elecciones Municipales. No ha nacido ninguna solución o propuesta por parte del equipo de gobierno, del lado de Ahora Madrid. Si hoy o mañana se celebrasen nuevas elecciones, nos encontraríamos que padecemos los mismos inconvenientes de meses atrás, con el agravante de que la falta de diligencia y determinación sobre los mismos ha provocado su empeoramiento.
No se puede diluir ni aplazar aquello que exigimos a los representantes políticos, lo que en el día a día debemos ofrecer a todos aquellos que depositaron su confianza en nuestra capacidad de gestión.
Desde el Ayuntamiento quiero mejorar la calidad de vida de mis vecinos. Y así me planteé unos objetivos; solucionar una serie de problemas que ya no podían esperar más y por los que apostar:
Apostar decididamente por la rehabilitación de los barrios, por la regeneración urbana, para mejorar las condiciones de alojamiento de aquellos con quienes compartimos nuestro espacio vital. Se trata de abordar una cuestión muy positiva y necesaria desde el punto de vista social –es integradora y rechaza los guetos– y económica: crea empleo y riqueza, y además genera grandes beneficios medioambientales que hacen que hagamos una urbe sostenible y eficaz desde el punto de vista energético.
Apostar igualmente por la accesibilidad universal. En edificios y calles, para que el proyecto vital de los ciudadanos vaya de la mano del proyecto urbano, eliminando las barreras físicas, de forma que todos podamos vivir plenamente la ciudad. Sin excluir a nadie, porque excluir va en contra de la igualdad de oportunidades de todos los madrileños.
Por último, apostar por la simplificación normativa. Entendiéndola como el conjunto de acciones encauzadas a examinar, identificar y realizar propuestas que mejoren los procedimientos administrativos. Con una finalidad simple y compleja al mismo tiempo. Y es que el ciudadano, cuente con el apoyo de la Administración en el desarrollo de su actividad profesional o personal, y no con innumerables trabas burocráticas que la dificulte.
No sé si la alcaldesa de Madrid comparte estos objetivos. Y digo esto porque lo único que se ha hecho por el momento ha sido convocar mesas, observatorios, y realizar dudosas encuestas (Plaza España) de forma sectaria y con un único objetivo: ganar tiempo, para que la amalgama de siglas que encierra Ahora Madrid pueda ponerse de acuerdo sobre la operación Chamartín, Mahou Calderón, y tantas otras cuestiones que necesitan de empuje y definición.
Pero han transcurrido nueve meses. Un tiempo preciado que Madrid no puede perder. Porque mi ciudad, Madrid, necesita estar viva, y no inmersa en la parálisis por el análisis.
> Bosco Labrado es portavoz adjunto de Ciudadanos (Cs) en el Ayuntamiento de Madrid