El Mercado de Fuencarral abre sus puertas al público por última vez este sábado después de 17 años de actividad en los que se ha convertido en un referente del barrio de Malasaña por su oferta comercial de vanguardia y su vocación de modernidad.
La gerencia de la instalación ha decidido así dar por concluido un «ciclo» como instalación «pionera» en el comercio alternativo tanto en el barrio Malasaña como en Madrid, donde se había convertido en un referente de la calle Fuencarral, uno de los mayores ejes comerciales de la ciudad.
Para conmemorar esta despedida se han organizado durante las últimas fechas «sugerentes liquidaciones» a modo de despedida. El Mercado de Fuencarral comprende 2.500 metros cuadrados repartidos en tres plantas y acoge unos 60 locales comerciales.
«Un hervidero de pequeños comercios que trajeron a un barrio deprimido una ecléctica amalgama de productos. Una Torre de Babel unida por la libertad, la modernidad y la innovación», recalca la gerencia en su web para resaltar que la actividad comercial se fusionaba con la expresión artística en diversas modalidades.
Prueba de ello son las actuaciones de Djs y la «exitosa» Rave del Mercado, «todo un emblema de los primeros pasos de música electrónica en España» que se celebró en seis ocasiones, en diversos puntos de la Comunidad de Madrid, y siempre con un «avanzado cartel de actuaciones y un gran éxito de público».
También ha sido una pieza clave en la conversión del eje Chueca-Malasaña como centro de «modernidad», modelo que ha sido imitado por los comercios de la zona.
Por tanto, este sábado es el momento en que cierre este referente comercial, «un adiós lleno de satisfacción por el trabajo realizado y de agradecimiento para todos los que han compartido y formado parte de la aventura».