El candidato del PSOE al Ayuntamiento de Madrid, Antonio Miguel Carmona, se ha comprometido este martes a construir 30 nuevas escuelas infantiles en la capital y a que «nunca más» los criterios económicos primen sobre los educativos en la adjudicación de estos centros de gestión indirecta.  

Así lo ha señalado Carmona, quien tras reunirse con directoras de escuelas infantiles de la capital, subrayaba la «especial atención» que el Ayuntamiento, si gobierna el PSOE, prestará a este tramo educativo (de los 0 a 3 años), fundamental en el desarrollo de las personas «porque es un derecho fundamental de los más pequeños de nuestra ciudad y no una etapa meramente asistencial».

El compromiso suscrito hoy por el responsable socialista pasa por crear una escuela infantil por distrito y las nueve restantes, según necesidades de los distritos y barrios de mayor población infantil, todas ellas públicas y de gestión pública.

Del mismo modo, el candidato del PSOE ha anunciado que bajará el coste de las escuelas infantiles al menos un 50 por ciento, para conseguir a medio plazo la escolarización para todos los niños que lo necesiten y recuperará la cuota cero para facilitar el acceso a escuelas infantiles públicas a las familias que más lo necesitan por su bajo nivel de renta.

Carmona ha puesto de manifiesto que 150.000 niños de 0 a 4 años no tienen escuelas suficientes. Además, «en plena crisis, el PP ha aumentado de forma abusiva las cuotas de estas escuelas (de unos 50 euros antes hasta 180 euros de media actualmente) y ha recortado la subvención del 67% de hace pocos años al 20% actual, lo que excluye de las escuelas infantiles públicas a las familias más desfavorecidas», ha dicho.

Según ha explicado, paralelamente ha descendido la calidad del servicio, ya que los pliegos de condiciones de adjudicación del servicio a las empresas han pasado de cuantificar en un 64 por ciento el proyecto educativo (año 2008) a un 35 por ciento en el actual curso.

«El PP ha preferido que la oferta económica -temeraria en muchas ocasiones- puntúe más que el proyecto educativo, y al final salen más baratas las escuelas privadas que las públicas porque las primeras reciben una bonificación de la Administración que supone un presupuesto de 34 millones de euros», ha apuntado.

Esto significa, ha dicho, que «se está primando la escuela privada sobre la pública y se expulsa a auténticos profesionales en la gestión de escuelas infantiles para sustituirlos por empresas de limpieza». «Es una auténtica vergüenza», ha recalcado Carmona, refrendado por las directoras de escuelas infantiles, quienes han insistido en que esta etapa formativa no puede convertirse en un «negocio».

PLIEGOS DE CONDICIONES

Por todo ello, Antonio Miguel Carmona ha asegurado que modificará los actuales pliegos de condiciones que regulan la gestión indirecta de las escuelas infantiles, valorando como criterios determinantes el proyecto Educativo y la estabilidad de la plantilla.

Asimismo, pondrá en marcha un Plan Municipal de Inspección y Control de Calidad de las Escuelas Infantiles públicas, concertadas y privadas, cuyo fin será comprobar que funcionan con los requisitos de habitabilidad, seguridad, acústica, higiene, ventilación, iluminación, eliminación de las barreras arquitectónicas etcétera establecidas por Ley y que aquellos centros que algunas multinacionales quieren gestionar «sean gestionados correctamente».

También ampliará la cobertura horaria base de los centros de educación infantil de competencia municipal y analizará la viabilidad de horarios de tardes y de fines de semana dependiendo de las necesidades de las familias, «garantizando en todo momento los principios pedagógicos y de socialización de los menores, y promoverá la participación y toma de decisiones de las familias en el proceso educativo de sus hijos e hijas, procesos de escolarización y en el acompañamiento escolar».  

Finalmente, el compromiso de Antonio Miguel Carmona con la educación infantil también contempla garantizar la atención a todos los niños cuyas familias lo precisen por falta de recursos –durante los diferentes periodos vacacionales, incluido el mes de agosto– e incorporar toda la red de Escuelas Infantiles públicas, concertadas y privadas al Programa de Actividades Extraescolares y oferta cultural de la ciudad.