Tras cinco años de investigación preliminar, la Comisión Europea ha acusado a Google de abuso de posición dominante por favorecer el uso de su buscador en los servicios comparativos a la hora de comprar a través de internet.
La Comisaria de Competencia, la danesa Margrethe Vestager, ha sido la encargada de comunicar la decisión de los Comisarios respecto a la investigación que comenzó Joaquín Almunia en la pasada legislatura. No obstante, no todos los miembros de la Comisión están de acuerdo con la enmienda, puesto que esperaban que además de limitar sus servicios de compra, investigasen la forma de operar de Google y su buscador.
Por su parte, el gigante americano, que ya ha declarado que “respeta la decisión de Bruselas, pero está totalmente en contra”, tiene 10 semanas para preparar su defensa si no quiere enfrentarse a sanciones multimillonarias que podrían llegar al 10% de su facturación anual, lo que serían unos 6.600 millones de dólares de sanción.
Además, Compentencia ha informado de que abrirá una investigación sobre Android para averiguar si también se ha llegado a acuerdos con los fabricantes de móviles para que utilicen el sistema operativo de Google, consiguiendo así más beneficios. «La Comisión ha recibido una serie de quejas y he llevado de motu propio una investigación, que hoy se abre en profundidad para analizar las alegaciones”, ha informado Vestager durante la comparecencia.