Sí, es Nochevieja y los planes son los de siempre. Por eso hoy os proponemos un día repleto de actividades para que podáis disfrutar desde por la mañana hasta después de las uvas. Vamos al grano.
Por la mañana, si queréis un plan familiar, os recomendamos “Divertimagia” en la Escalera de Jacob. Un teatro infantil de la mano de Ernesto Misterio, gracias al cual será posible entrar en un mundo mágico donde la ilusión se confundirá con la realidad para los niños.
Cuándo: 12:00 horas
Dónde: Calle Lavapiés, 9 (metro Tirso de Molina o Antón Martín)
Precio: 8 euros
Después, podéis visitar el espectacular Belén del Museo de Historia de Madrid, un nacimiento napolitano del siglo XVIII compuesto por más de cincuenta figuras articuladas, junto con sus accesorios, enriquecido por una escenografía de aire oriental.
Cuándo: de 9:30 a 20:00 horas
Dónde: Calle Fuencarral, 78 (metro Tribunal)
Precio: gratis
Y un poco de espíritu deportivo, que en estas fechas no todo es comer o beber. Sin duda, la cita del día es la San Silvestre Vallecana. Si no estáis entre los 40.000 corredores que ya han hecho la inscripción, podéis acudir a apoyar a los valientes dispuestos a pasar frío o, incluso, participar de manera extraoficial.
Cuándo: salidas a las 17:30, 17:45, 18:00 y 18:15 horas
Dónde: la carrera parte de la calle Concha Espina con el Paseo de la Castellana (metro: Santiago Bernabéu)
Precio: gratis
Hayáis corrido o no, os merecéis unas ricas cañas y una buena cena porque la noche se presenta muy larga. Al ser un día complicado para reservar, el mejor plan posible que os ofrecemos es ir a La Latina y cenar de tapas en los múltiples locales.
Dónde: Calle Cava Baja (metro La Latina)
Y desde allí, andando, hasta la Puerta del Sol. Esta opción sólo la recomendamos a aquellos que buscan un ambiente excesivamente animado, ya que las aglomeraciones están aseguradas. Existen varias teorías sobre el origen de la tradición de las uvas, pero la más arraigada entre los españoles, es la que sitúa el inicio de esta costumbre en 1909, cuando los viticultores levantinos tuvieron tal excedente de esta fruta que decidieron repartirla gratuitamente entre los ciudadanos, aludiendo que les traería fortuna comerlas en Nochevieja.
Si después queréis salir de fiesta, los barrios de La Latina, Huertas y Chueca ofrecen diversas alternativas.